domingo, 20 de febrero de 2011

¿El fin de una etapa?



Mientras suenan las notas de Intro, la canción que abre este post quiero despedirme de todos vosotros. Este espacio, este canto al exterior, esta válvula de escape ha perdido su razón de ser y a las pruebas me remito. Hace semanas que no he actualizado nada porque estaba realmente agobiado y sin tiempo, pero desde hace dos días que he acabado mis exámenes habría podido compartir algo con vosotros, pero no me apetece, no tengo ganas y así, ¿que sentido tiene seguir?

El por qué es una suma de razones, aunque en el fondo creo que no tengo nada más que aportar, mis gustos musicales son eso, mis gustos y no son especialmente comunes así que no creo que mucha gente disfrute con lo que cuelgo. Mis experiencias vitales son cada vez más inexistentes y tampoco creo que vayan a más. Ando perdido en medio de un desierto y supongo que alguna vez llegaré al oasis, pero mientras tanto, la travesía no requiere que me vaya deteniendo a contar y a hablar sobre la nada, así pues, dejo de daros el coñazo. Supongo que por alguna red social de vez en cuando compartiré alguna canción pero tampoco lo creo, por lo menos en un futuro cercano. Eso si, si alguna vez vuelvo a tener la ilusión que tenía antes por crear textos que de verdad merecieran la pena acompañar a bellas canciones espero volver. Pero mejor que esto muera así, antes de seguir siendo un escondite agonizante sin nada que aportar.

Y para despedirme otra canción de Staind y tocada de la forma más desnuda: sólo una guitarra acústica, la voz de Aaron Lewis y la mejor de las letras posibles. Adiós.